La ciencia del conocimiento

La Biblioteca de Alejandría:

El Centro mundial del saber:

La Biblioteca de Alejandría en el antiguo Egipto fue algo más que una simple biblioteca, fue el primer centro de investigación del mundo. Alejandría, invitaba a dignatarios de todo el mundo a estudiar en las salas de su biblioteca; los estudiosos residentes en la ciudad podían vivir, comer, aprender y trabajar con los visitantes que traían nuevos e importantes conocimientos.

Lo fascinante de la biblioteca de Alejandría es que era, el centro más importante del saber del mundo antiguo. No se sabe en donde estaba; no sabemos cómo era, no sabemos con detalle que libros tenia, no sabemos quienes estuvieron allí, hay más cosas que no sabemos qué cosas que sabemos y fue quizás el fenómeno más importante de la historia intelectual del hombre.

Situada a 210 kilómetros al noroeste del Cairo Alejandría es la segunda ciudad más grande de Egipto y cede de su principal puerto. En el siglo cuarto antes de cristo, este magnífico puerto abierto y su isla de faros, atrajeron al ilustre conquistador Alejandro Magno, quien fundó la ciudad en el año 332 antes de cristo, eligió este lugar para su localización, el mar mediterráneo, la isla de faros y la proximidad del rio Nilo, la convertían en una base naval. El puerto natural, permitía el fácil acceso a todas las naciones del cada vez más floreciente mediterráneo, el comercio y el intercambio con otras civilizaciones, resultaba posible. Alejandría poseía todos los atributos para convertirse en el nuevo centro mundial del pensamiento y la cultura.

Cuando Alejandro Magno contemplo el puerto vacío, tuvo una visión clara de la ciudad que llevaría su nombre, pero, ¿por qué querría un joven guerrero como Alejandro construir una biblioteca? ; Mucho antes de que Alejandro penetrase en Egipto, generaciones de griegos luchaban por desvelar los enigmas de la existencia, todo estaba abierto a la investigación. Ateneas en Grecia, se convirtió en el centro inlectual de la antigua Grecia, el discurso y el debate eran respetados pasatiempos; la oratoria fue la cuna de eruditos que alcanzaron la celebridad; en las siglo IV y V antes de cristo, hombres como Sócrates, Platón y Aristóteles trabajaban en Atenas, ellos eran los populares controvertidos artífices de la política de la época, sus antiguas enseñanzas constituyen la base del pensamiento moderno y sin embrago las vidas de estos antiguos intelectuales convergieron con la de uno de los más grandes generales de la historia Alejandro Magno.

La tradición cuenta que, Alejandro Magno, fue discípulo de Aristóteles y Aristóteles, fue discípulo de Platón, que a su vez, lo fue de Sócrates. Platón y Sócrates, creían que los sentidos nos confunden, que uno no debía creer lo que veía, creían en verdades inmutables y eternas que son aprendidas por la mente, no por los sentidos. Aristóteles dijo, no, nada penetra en la mente, si no es a través de los sentidos y el a su vez, enseño a Alejandro Magno.

Alejandro era hijo del Rey Filipo de Macedonia ( el estado de la antigua Grecia que más rápidamente se expandía) naturalmente el Rey Filipo, deseaba el mejor preceptor del país para su hijo, así que a la edad de 13 años, Alejandro, fue confiado al gran filósofo Aristóteles, el preceptor, despertó en el joven guerrero, un amor apasionado por el saber: “Los hombres instruidos son seres superiores a los ignorante, como los vivos lo son a los muertos. El destino de los imperios, depende de la educación de su juventud. Aristóteles el filósofo, siglo IV antes de cristo”.

Alejandro, consideraba el conocimiento como un arma para el poder, en su lucha para conquistar el mundo una década más tarde, Alejandro, llevavaba consigo en las batallas una copia de Aristóteles de la Ilíada de Homero (el guerrero era también un poeta).

Con la fundación de Alejandría se inició un nuevo y brillante periodo de la historia de Grecia, era el amanecer de un nuevo imperio y de una nueva forma de pensamiento.

Cuando Alejandro magno murió, Ptolomeo, su general de más confianza, le sucedió en el gobierno de Egipto y construyó la biblioteca concedida por Alejandro. Ptolomeo primero, inicio una dinastía, una serie de reyes de la misma familia que gobernarían Egipto durante casi trescientos años; Ptolomeo primero, convirtió a Alejandría en la capital de Egipto, pero la ciudad aún se enfrentaba a la poderosa competencia de los militares que gobernaban otros países, que competían unos con otros, en poder, en riqueza y en grandeza. Uno de los campos de competición era la cultura. Ptolomeo, quería que su ciudad fuese no solo la capital de un poderoso país, sino, un centro de ilustración, conocimiento y aprendizaje.

Los primeros ciudadanos de Alejandría eran egipcios, soldados macedonios, una gran comunidad judía e inmigrantes griegos; gracias a Ptolomeo, Alejandría empezó inmediatamente a atraer a influyentes intelectuales de todo el mundo griego; Ptolomeo primero, era muy inteligente y se rodeó de un círculo de importantes hombres ilustrados en el campo de la literatura, la filosofía y la ciencia.

El arquitecto Demetrio De Falero asistió a Ptolomeo en el diseño de los planos del nuevo centro. Hoy día, ladrillos, templos caídos y esfinges semidestruidas, son lo único que queda de esta institución, se cree que el Cerapeo (la biblioteca hija que se construyó cuando la principal comenzó a desbordarse con libros y gente) fue construida más hacia el interior que la biblioteca principal y el museo. ¿Pero entonces?, ¿Dónde estaba situada la parte principal de la biblioteca?

Nadie está seguro de ello, La biblioteca de Alejandría nos plantea hoy más preguntas que respuestas, no hay documento de la biblioteca que muestren tampoco como era, se supone que probablemente estaba construida cerca del puerto, se cree que estaba cerca o dentro del palacio llamado Bruch ion o museo.

Su inmensa cantidad de obras fue adquirida principalmente gracias a la compra de obras a través de los mercados de libros. Adquiriendo la mayor cantidad de libros que jamás existió en la antigüedad.